22 septiembre 2014

Lanzarote


















Atrás se queda el verano como atrás queda, y ya distante, nuestro paso por Lanzarote. Isla de impactante paisaje, más allá de lo que hayas leído, visto u oído sobre ella. Isla que es necesario ver, pisar, nadar, sentir. Isla en la que un día la tierra decidió abrirse para cubrirlo todo de rocas y lava… Isla de aguas verdes, de playas blancas, de playas negras, de largos caminos polvorientos, de extensiones silenciosas, de cactus recortados contra paredes blancas, de gatos dóciles, de volcanes de colores, de piedras calientes… Isla que supo volver a la vida porque dicen de Timanfaya que «no es una tierra muerta, sino recién nacida».

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